Césped artificial ecológico

El ahorro de agua podemos entenderlo como una necesidad más que una moda pasajera, en este sentido se ha utilizado el césped artificial como un producto ecológico, pero no pretendemos hacer de esta necesidad una argumento de venta, tan sólo ser claros en las ventajas reales de utilizar nuestros productos. Debemos intentar que las zonas verdes de crecimiento natural, bosques, praderas incluso huertos para el consumo, sean el pulmón de nuestros pueblos y ciudades, pero no a costa de caprichos en pequeñas superficies o zonas públicas como rotondas y medianeras que conllevan un gasto desproporcionado e innecesario de agua. El 80% de los jardines de nuestras casas no superan los 200 metros cuadrados de superficie y son regados con agua potable, que además de suponer un coste enorme para nuestros bolsillos, llevan implícito un consumo de agua que se reduciría en más de un 90% con la instalación  de césped artificial. No quiero aburriros con números y porcentajes, tan sólo poner sobre la mesa un problema que con pequeños cambios en la mentalidad de todos, supondrá grandes ventajas para el futuro y el césped artificial debe aportar su granito de arena.